Muchos de los traductores trabajamos en solitario en nuestra casa. Quizá tenemos un leve contacto con nuestros colegas de la profesión, pero no creo que sea algo constante, del día a día. Aunque no todos tengamos nuestra manera de trabajar y de traducir, coincidimos en muchos aspectos: los miedos e inseguridades que nos puede generar la traducción. ¿Tenemos todos estos miedos e inseguridades? Echemos un vistazo a algunos problemas que hemos recopilado.
No habrá siguiente proyecto, el primero de mis miedos e inseguridades
Quizá más de lo que pensamos, todos los traductores suelen temer que no aparecerá un siguiente proyecto. Esto es totalmente irracional y difícil de explicar. Siempre habrá un siguiente proyecto; pero me refiero al periodo de tiempo entre finalizar una traducción hasta la llegada de un nuevo proyecto. Si pasamos tres días sin un proyecto, nos ponemos paranoicos. Por nuestras mentes hay una frase que no para de repetirse inconscientemente: «qué pasaría si». Después, por supuesto que nos reímos de nosotros mismos cuando aparecen tres nuevos proyectos a la vez.
No soy lo suficientemente bueno
Esta duda constante y la búsqueda de la perfección pueden ser, por supuesto, buenas. La mayoría de nosotros somos perfeccionistas y en una profesión como la traducción, dudar es una señal generalmente buena el dudar. Nos gustaría poder decir que, con el tiempo, estos miedos e inseguridades desaparecen. Sin embargo, creemos que solo disminuyen y acompaña a todos los traductores a lo largo de su carrera. Nuestra arma para combatirlos era realizar todas las pruebas y obtener todos los títulos posibles para utilizarlos como argumentos contra todas mis dudas. Sin embargo, después empezamos a pensar: «vale, fuimos buenos para este proyecto, pero este es una cosa completamente nueva…¿Qué pasa si no somos lo suficientemente buenos para ello?» ¿Hay alguna posibilidad de salir de esta duda?
¿Cómo sé que estoy haciendo las cosas bien?
En sí, trabajar solo tiene sus beneficios, pero también limita tus oportunidades para compararnos secretamente con nuestros compañeros de trabajo. En un entorno de oficina normal, uno se hace una idea de cómo trabajan los demás, su aptitud y sus resultados. Te puedes comparar más o menos con a los demás y lograr un poco de paz mental con tus miedos e inseguridades. También puedes preguntarles cómo hacen las cosas, o cómo hacerlo como ellos. Debido a que somos traductores freelance, hacemos las cosas a nuestra manera, sin posibilidad de fijarnos en el trabajo de otro. Y aunque haya muchos consejos ahí fuera, ¿cómo sabemos si teníamos razón? ¿Qué pasaría si se nos olvida algo importante?
Me voy a poner enfermo
Como único sostén durante años, desarrollamos un miedo real de enfermar y de no poder trabajar. Este miedo se aplica a cualquier cosa, desde un resfriado leve hasta imaginar enfermedades graves y crónicas. Nuestra cabeza está llena de escenarios y medidas de emergencia para hacer frente a enfermedades, accidentes o circunstancias imprevistas. ¿Padecemos todos estos miedos e inseguridades?
Estoy haciendo demasiadas cosas a la vez
Especialmente en el ambiente actual, en el que se nos dice que realizar tareas múltiples está mal y reduce nuestra productividad. Muchos pensamos que hacer muchas cosas al mismo tiempo, reduce nuestra eficacia como traductores. Por supuesto, hacer solo una tarea es la tendencia actual, y preguntas como «¿te queda tiempo para traducir?» no quitan la presión. Quizá estos miedos e inseguridades se basan en el pensamiento subyacente de que no nos tomarán en serio si realizamos demasiadas cosas. Mientras que realizar muchas o demasiadas cosas, o el tiempo, es subjetivo, a veces reducir los proyectos adicionales o secundarios es contraproducente. Sin embargo, hay mucha gente ahí fuera que prospera cuando realiza muchas cosas al mismo tiempo.
Estoy equivocado, otro de mis grandes miedos e inseguridades
El miedo a estar equivocado se emplea mucho más allá de la mera traducción freelance. A menudo es la base de muchos comportamientos y reacciones. Tengo miedo de equivocarme cuando estoy corrigiendo o editando el trabajo de otra persona. Miedo a equivocarme cuando estoy dando consejos. Me aterra equivocarme cuando me estoy dirigiendo a nuevos clientes. La buena parte de este miedo es la motivación y nos empuja a ser mejores profesionales. El lado oscuro de este miedo nos vuelve agresivos y defensivos a algunos de nosotros.
¿Has vivido alguna vez alguno de estos miedos e inseguridades? ¿Tienes algo más que hayas experimentado u observado en otros?
Los comentarios están cerrados.