La posedición
La posedición consiste en mejorar, corregir y revisar la traducción dada por un traductor automático.
Un traductor automático puede proporcionar una traducción en segundos, pero esto no significa que esté bien del todo. Los traductores automáticos tienden a traducir palabra por palabra y no tienen en cuenta el léxico ni la cultura. Por lo que no es una traducción de calidad ni tampoco fiable del todo.
Por esta razón es importante el trabajo del traductor en la posedición porque corrige estos fallos y hace la traducción más humana.
Cabe mencionar que esta forma de traducir ahorra tiempo, pero no es apta para todas las especialidades. La traducción literaria, sobre todo, tiene un gran factor humano en el que se involucran los sentimientos y el sentido.
Uso de la traducción automática y la posedición en las empresas
Un estudio acerca del uso de la traducción automática en empresas desveló un bajo número en su utilización.
Los expertos aseguran que estas cifras son así porque las empresas encuestadas no sepan si utilizan una traducción automática debido a las herramientas TAO.
Además, muchas empresas piensan que requiere más trabajo realizar una traducción automática y, posteriormente, la posedición. Por este motivo continúan traduciendo de la manera tradicional. A esto se le suma, la poca confidencialidad al utilizar un traductor automático gratuito y los altos costes de tener uno propio de la empresa.
Actitud hacia la posedición
Se realizó un estudio en el que se reflejaba que la mayoría de los traductores aceptaban realizar el proceso de posedición, pero con reticencias. Otra menor parte, aceptaban el encargo sin problema, y una pequeña parte no los aceptaban. Esto se puede traducir en que todavía no es una práctica muy común, pero que cada vez se va aceptando más.
En conclusión, muchas empresas utilizan la traducción automática y luego el proceso de posedición en su flujo de trabajo. Aunque la mayoría de ellas no lo admiten. La mayoría de las empresas que utilizan este tipo de traducción son las más antiguas y de tamaño mediano.
Esto es así por la capacidad económica que presentan. Ya que les resulta más económico realizar una posedición que una traducción profesional desde cero.